Tomate el tiempo de reflexionar sobre tus resultados

Si queremos conseguir algo, sin importar que sea, lo más seguro es que nos pongamos metas de que esperamos conseguir. Estas suelen actuar como un baremo de qué esperamos para poder mantenernos motivados y seguir trabajando.

Cuando alcanzamos estas metas no suele haber problemas y simplemente seguimos con nuestras tareas del dia a dia.

Pero cuando conseguimos superar nuestras expectativas o cuando nos quedamos muy por debajo lo que suele pasar es que nos desestabilizan y empezamos a esperar más o desarrollamos más estrés, una mayor necesidad de demostrar que podemos conseguirlo.

Ambas acciones lo único que muestran es nuestra falta de estabilidad y como los resultados siguen siendo mucho más importantes para nosotros que el proceso.

Estos cambios pueden suponer que nos vaya peor, pero a su vez pueden ser una gran oportunidad para meditar sobre lo que estamos haciendo y cómo mejorar.

Según Ryan, la mejor forma de evitar que nos controle el ego y que podamos trabajar de la mejor forma posible es usar estos puntos de inflexión como una señal  de que necesitamos meditar y volver a entender nuestra situación.La diferencia entre un profesional y un aficionado está en cuánto tardan en aceptar la situación y seguir adelante. Los resultados solo son parte del proceso, y lo único que controlamos es el proceso así que sigamos con ello paso a paso.

Disfruta de Nuestros Artículos en tus Redes Favoritas

Únete a cientos de pensadores y recibe ideas de los mejores filósofos directamente en tu email

Diseñados para hacerte pensar

¿Quién es Aristóteles?

Algunos estudiantes pasan toda su vida siguiendo los pasos de sus maestros. Analizan, fortalecen y…

Leer más